Viernes 15 de septiembre
Virgen de los Dolores
CORAZÓN DE MADRE
María, la Madre de Jesús, es la que no sólo perdona, sino que ama también a los que le causan sufrimientos y le clavan espadas de dolor. Ella al pie de la cruz está amando y perdonando a los hombres, sus hijos, que han llevado al suplicio y a la muerte a su hijo Jesús. Ella sabe hacer suyos los sufrimientos y el dolor de su Hijo crucificado y los innumerables padecimientos de sus hijos los hombres.
El anciano Simeón comprendió proféticamente cómo una espada de dolor le iba a atravesar el corazón a María (Lc 2,35); pero de ese Corazón herido está brotando una fuente inagotable de compasión y de amor hacia todos los que han herido a su Hijo, a otros hombres, a sí mismos y a Ella con Jesús.
Ella acogió en su corazón de Madre los sufrimientos y la muerte de su Hijo. Nosotros, con Jesús en cruz, podríamos dirigirnos a su Madre y decirle: "Ahí tienes a tu Hijo" (Jn 19,26). Nosotros fuimos los que así Le maltratamos. Mira que nosotros somos tus hijos pecadores, que queremos llorar nuestro pecado. Perdónanos, Madre buena, e intercede por nosotros para que con Jesús "aprendamos sufriendo a obedecer" (Hb 5,8). Acoge nuestros sufrimientos y nuestras muertes. Y que nuestros sufrimientos y los de toda la humanidad, unidos a los tuyos y a los de Jesús, nos ayuden a recibir de Dios el perdón y la salvación eterna y deseada. Amén.
"El Pan de la Palabra dánosle hoy" Ciclo A - Ceferino Santos S.J.